Imelda Garza Tuñón, la viuda del joven cantante, enfrentó una difícil situación tras la partida de su esposo. La pareja vivía con su madre Maribel Guardia y su padrastro Marco Chacón, por lo que no estaba claro cuál sería su decisión con respecto a su vida y la de su hijo. Sin embargo, Imelda ha tomado una importante determinación en cuanto a su relación con su famosa suegra.
Imelda considera a Maribel Guardia como una segunda madre y destaca la estrecha relación que han tenido siempre. Ambas han sido un gran apoyo mutuo y han construido una relación llena de amor y armonía. La joven reconoce el apoyo incondicional que su suegra ha brindado a su hijo y promete estar ahí para ella en todo momento, especialmente en estos momentos tan difíciles.
Además de su compromiso con su suegra, Imelda ha decidido quedarse en la misma ciudad y seguir adelante con su carrera artística como cantante y actriz. La joven explica que su vida y trabajo están allí y no piensa dejar sola a su suegra en estos momentos de dolor. Imelda asegura que estará con ella siempre y la apoyará en todo lo que necesite.
Por último, Imelda resalta el legado que su esposo Julián Figueroa dejó tras su fallecimiento. Él fue una persona que siempre buscaba resolver los problemas familiares y unir a todos los miembros de la familia. En estos días difíciles, la familia ha demostrado su apoyo y solidaridad hacia Imelda y su suegra, lo que ella valora y agradece enormemente.
