Chiquis Rivera volvió a encender la conversación en redes sociales al hablar con total franqueza sobre la tensa relación que mantiene con su tía Rosie Rivera, hermana menor de la fallecida Jenni Rivera. La cantante, quien ha sido una de las voces más abiertas dentro del clan Rivera, expuso que la raíz de muchos de sus conflictos familiares proviene de la intervención de su tía en momentos clave de su vida, especialmente durante la etapa en que su relación con su madre se deterioró.
Según explicó en los clips compartidos por la cuenta de farándula “La Comadrita”, los cuales provienen de su documental en Vix, Chiquis asegura que Rosie tomó un papel de intermediaria entre ella y Jenni. Sin embargo, en lugar de facilitar el diálogo, habría distorsionado los mensajes. La artista recuerda que cuando intentaba hablar con su madre, Rosie le decía que “Jenni no estaba lista”, mientras que Jenni interpretaba que su hija no buscaba el acercamiento.
Ese desencuentro provocó un doloroso distanciamiento que nunca se resolvió por completo. Chiquis también señaló que Rosie nunca la aceptó y que, desde su nacimiento, la trató con frialdad, insinuando que pudo haber sentido celos por perder el lugar de “favorita” de Jenni. A esto se suman los señalamientos de Rosie sobre su carrera, acusándola de intentar ocupar el lugar que dejó su madre en la música.
Hoy, la intérprete afirma haber perdonado, pero reconoce que la relación con su tía quedó marcada por heridas profundas. Aunque respeta el lazo familiar, admite que ya no existe la confianza necesaria para un acercamiento real. Para Chiquis, hablar de este tema es parte de sanar y de contar su verdad.